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Ordet, la Palabra - Carl Theodor Dreyer - Qué és realment la fe?
dimarts 6/desembre/2011 - 06:20 1402 1
Aquesta es sense dubte una de les meves pel·licules preferides. Basades en una famosa obra de teatre de Kaj Munk. Que és realment la fe, que él el reament important de les creences? La praxis, els ornaments, el sentiment intern, la comprensió...
El final es realment apabullant (es un veritable spoiler, així que no el mireu si voleu veure la pel·licula): www.youtube.com
Us deixo una crítica de la pel·licula, escrita per l'usuari kafka de filmaffinity, que realment arriba al moll de l'ós
Una de las grandes películas de todos los tiempos, y probablemente, el film más característico de su director, el danés Carl Theodor Dreyer.
En "Ordet", Dreyer cuenta una historia determinada por el aspecto religioso, para trascendiendo éste, sublimar, en un final sobrenatural, el triunfo absoluto de la Fe, pues ¿qué hay más grande que el hecho de que una persona muerta, ya en el ataúd, resucite y vuelva a la vida?. Es el paso de lo religioso, tradicionalista, hermético, a lo espiritual, ancho, abierto. Dreyer nos comunica que la falta de Fe de la gente común, y más aún, la falta de auténtica Fe de aquellos que se creen perfectos pastores de Dios, ha desvirtuado con sus disputas y roces el mensaje primigenio.
Es, además, una reivindicación de la figura de Jesucristo, hecha de manera nada convencional, pues es a través del personaje de Johannes, alguien esquinado, ignorado, al que se busca encerrar en su aparente locura evangelizadora.
"Ordet" es practicamente un tratado de teología, en el que Dreyer expone de forma metódica, ceremoniosa, austera, bajo su manto de cine basado en el esquema de transmitir con la mínima acción, la máxima emoción, culminado en un final imponente, osadísimo, dónde el conflicto religioso queda aniquilado y fusionado en la verdad de la Fe.
Es una película única, pues creo que aún siendo o sin ser creyente, transmite la sensación de presenciar una obra nada común, es decir, que su contenido podrá ser discutible, pero su continente es irrechazable.
En "Ordet" aparece fuertemente la figura de Kierkegaard con sus angustias metafísicas y existenciales, y se debate sobre la figura de Dios, como en Bergman, pero de forma más llana, más austera, aunque igual de grave. Solo me fallan un poco unos actores demasiado estáticos y miméticos, aunque quizás también es lo que busca el director, para transmitirnos esa sensación de dormidera espiritual de toda la película.
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